Los cuatro palos de los arcanos menores y los elementos
La relación de los cuatro palos de los arcanos menores del Tarot y los cuatro elementos parece evidente según la siguiente sentencia del Mensaje Reencontrado de Louis Cattiaux:
“La mezcla de los elementos que forma las combinaciones múltiples de la creación, es como la mezcla de cartas de la baraja, que forma las combinaciones múltiples del juego: los elementos vuelven a la masa y son después combinados de nuevo, como las cartas de juego vuelven al mazo y son redistribuidas sin aumento ni disminución real, pues no existe ganancia ni pérdida para el inmutable que ES”. (23/64.)
Por eso, quisiéramos presentar algunos versículos de esta obra que tienen que ver con ellos y con sus combinaciones.
02/72'. La reunión de los cuatro elementos forma la quinta esencia, raíz de la luna y el sol.
03/25 y 26. El nacimiento y la muerte, la acción y el reposo, la luz y las tinieblas, la unión y la separación, provienen del movimiento de los cuatro que producen los cambios del mundo.
El reposo de Dios se establece en la pureza cuando los elementos están unidos en perfecto equilibrio.
04/ 25'. Antes del comienzo todo permanecía en el reposo de las duras tinieblas de la muerte.
El fuego, al despertarse en el agua, ordenó el caos, y los cuatro elementos engendraron el
espíritu vivo del Universo
05/49'. Los cuatro elementos forman el alfabeto con el que Dios enseña a los hombres clarividentes.
18/30. El verdadero sabio es como un niño pequeño que sigue la naturaleza divina y que se hace obedecer por los elementos, sin sorprenderse en absoluto por ello.
20/46. La Providencia de Dios se manifiesta preferentemente por mediación de los creyentes de buena voluntad; pero puede excepcionalmente actuar por medio de los espíritus o incluso directamente combinando los elementos primordiales.
37/03. La sabiduría de Dios es un juego de los elementos naturales. La sabiduría del mundo es un juego del espíritu del hombre.
“La mezcla de los elementos que forma las combinaciones múltiples de la creación, es como la mezcla de cartas de la baraja, que forma las combinaciones múltiples del juego: los elementos vuelven a la masa y son después combinados de nuevo, como las cartas de juego vuelven al mazo y son redistribuidas sin aumento ni disminución real, pues no existe ganancia ni pérdida para el inmutable que ES”. (23/64.)
Por eso, quisiéramos presentar algunos versículos de esta obra que tienen que ver con ellos y con sus combinaciones.
02/72'. La reunión de los cuatro elementos forma la quinta esencia, raíz de la luna y el sol.
03/25 y 26. El nacimiento y la muerte, la acción y el reposo, la luz y las tinieblas, la unión y la separación, provienen del movimiento de los cuatro que producen los cambios del mundo.
El reposo de Dios se establece en la pureza cuando los elementos están unidos en perfecto equilibrio.
04/ 25'. Antes del comienzo todo permanecía en el reposo de las duras tinieblas de la muerte.
El fuego, al despertarse en el agua, ordenó el caos, y los cuatro elementos engendraron el
espíritu vivo del Universo
05/49'. Los cuatro elementos forman el alfabeto con el que Dios enseña a los hombres clarividentes.
18/30. El verdadero sabio es como un niño pequeño que sigue la naturaleza divina y que se hace obedecer por los elementos, sin sorprenderse en absoluto por ello.
20/46. La Providencia de Dios se manifiesta preferentemente por mediación de los creyentes de buena voluntad; pero puede excepcionalmente actuar por medio de los espíritus o incluso directamente combinando los elementos primordiales.
37/03. La sabiduría de Dios es un juego de los elementos naturales. La sabiduría del mundo es un juego del espíritu del hombre.